Posicionamiento sobre tragedias de Tlatlaya y Ayotzinapa.

Si bien en este blog he buscado especializarme en temas de regulación económica, competencia y consumidores, siempre he partido del principio de que ningún avance económico, reforma estructural o innovación económica tienen sentido si un Estado no sólo no puede garantizar el eficaz ejercicio de las libertades y derechos fundamentales de las personas, sino que además los representantes de éste mismo sean los que ejecutan o desaparecen a sus propios ciudadanos. Mi axioma es que la persona -ciudadano o consumidor- son el centro de gravedad de la vida política, económica y social. Por esto, es que las tragedias y barbaries de Tlatlaya y Ayotzinapa no me han pasado desapercibidas e invito respetuosamente a ustedes a asumir su posición y eventuales acciones ante esta grave crisis. Sin lugar a dudas todos tenemos nuestras labores y compromisos, pero ante esta barbarie no hay espacio para el cálculo político y se requiere el más firme compromiso con la vida, dignidad y libertades.

Con estas líneas, les comparto mi sentimiento y pesar, pero también reconozco que si se toman las medidas adecuadas, puede transformarse esta crisis en oportunidad. Les invito a leer mi artículo en Animal Político: «Comunidad de Libertades», el cual se enmarca en una serie de comentarios, bajo el título «Ayotzinapa: de la indignación a la acción cívica«, que aparecerán estos días en dicho medio escritos y redactados por integrantes y amigos de Central Ciudadano y Consumidor, como Gerardo Rodríguez, Carlos Martínez y Gisela Ávila. Cada uno de ellos abordará esta problemática desde una perspectiva y ángulo diferente, y todos buscamos contribuir a construir solidaridad entre los ciudadanos y evitar que la fragmentanción que vivimos se acelere. En mi caso, propongo que fortalezcamos el contenido y sentido de nuestra comunidad a través del ejercicio de libertades y responsabilidades. Ante estos momentos de depresión social, a todos los lectores les envío un abrazo fraterno.

La reforma fiscal y la responsabilidad cívica

¿Qué piensan de la Reforma Fiscal? ¿Qué tanto nos afecta como clase media? ¿Qué tanto beneficia al país y su economía? ¿Será efectiva para que con nuestro dinero se combata eficazmente la pobreza y desigualdad o como pasa en cada elección, los políticos se recriminarán que sus programas sociales han fracasado?

La reforma fiscal divide y polariza a nuestra sociedad entre ricos y pobres. Lo curioso es que somos ricos y estamos en el mismo rango quienes ganamos desde poco más de 40 mil pesos al mes hasta Carlos Slim. Por el otro lado, la reforma no diseña los incentivos para reducir la informalidad y consecuentemente genera más cargas a la parte minoritaria que sostiene a nuestro país y que paga por los programas sociales del gobierno, quien los otorga a los más desprotegidos como un acto filantrópico propio. Lo que es lamentable no son las políticas redistributivas (sobre las cuales podríamos discutir ampliamente), sino que el gobierno busca combatir la desigualdad, sin trazar un camino en el que nos dirijamos a la igualdad en la responsabilidad cívica que tenemos cada uno de los mexicanos frente al futuro y sustentabilidad de nuestro país.

Esto último es lo que más desesperanzador, porque implica que en el horizonte no se vislumbra que gradualmente más mexicanos nos hagamos responsables de contribuir a la construcción del destino de nuestro país. Les invito a leer el artículo que hoy me publica Animal Político.

OLIMPISMO, GLOBALIDAD Y HERENCIA

Quedé maravillado por los Juegos Olímpicos de Londres 2012. En efecto la competencia, orgullo y honor deportivos te llenan de energía positiva y motivación.

Pero en esta ocasión lo que más me impactó fueron las ceremonias tanto de inauguración como de clausura. La producción y espectáculo fueron de vanguardia, calidad y excelencia, sobre todo en cuanto al contenido y mensaje. Tuvieron el sello museográfico y de espíritu coleccionista londinense, cual si estuvieras visitando el British Museum.  Si recordamos la inauguración de Beijing 2008, también fue un evento impresionante. Ahora en Londres 2012 se esforzaron en contrastar con su antecesor el tipo de mensaje a transmitir al mundo.

En el caso de Beijing, cómo olvidar esas magníficas puestas en escena de centenares de danzantes haciendo el papel de obreros, resaltando un doble carácter: por un lado la productividad y crecimiento que destaca hoy a China, y por el otro, el principio colectivo y comunitario del régimen de gobierno. En cuanto a Londres, fue todo lo contrario, se destacó una visión individualista, liberal, monárquica, y hasta el valor y orgullo en su sociedad de los servicios públicos (recuerden la escena de la NHS).

Por otro lado, en China, recuerden el momento en el que se iza la bandera, cómo una escolta perfectamente uniformada lucía una marcha que sin duda te hacía sentir la fuerza y autoridad del régimen chino, es decir, fue un mensaje de fuerza al mundo. En cambio, en Londres, si bien militares izaron la bandera, contrasta con el himno que fue entonado por un grupo de niños con problemas de audición y si le agregas el momento en que se enciende el famoso pebetero, el paso de la antorcha de los ídolos olímpicos de antaño a jóvenes atletas (con abrazo fraterno de por medio), evidenció que los organizadores buscaron transmitir un mensaje de diversidad, inclusión, solidaridad y de comunión entre generaciones. El contraste de ambas inauguraciones es muy importante, porque no se necesita leer entre líneas para saber que ambos te sugieren un modelo de sociedad.

Adicional al contraste ideológico, en Londres 2012 no escatimaron recursos en divulgar las grandes aportaciones que han hecho en el ámbito de la cultura y entretenimiento. La exposición musical fue sólo una muestra de todo lo que han ofrecido al mundo y que evidencia que la música británica es un punto de encuentro universal. No importa en qué ciudad te encuentres, un conjunto aleatorio de personas de diferentes edades y orígenes, podría al menos tararear canciones de los Beatles, The Who, Queen, Pet Shop Boys, etc. En cuanto a una de las grandes pasiones de los ingleses que es el cine, pues también presentaron un héroe internacional como James Bond, o un clásico como Carrozas de Fuego. No podemos olvidar al humor inglés con figuras globalmente conocidas como Mr. Bean o Monthy Python. Y justo, para clausurar, también hicieron gala de lo que Londres ha aportado al mundo de la moda internacional.

De esta manera, en estos eventos Londres resaltó valores y principios políticos, sociales, económicos, culturales, artísticos y musicales, por los cuales no sólo es conocido globalmente, sino que además incide en la vida diaria de millones de habitantes en todo el mundo y desde hace siglos. Sin lugar a dudas, Londres presumió las principales contribuciones a la civilización que son de su manufactura y que contribuyeron a romper paradigmas, hitos y transformar sociedades. A nadie le queda la menor duda que hay algo o mucho de Londres en cada individuo, en todo el planeta.

Al ver los eventos no podía dejar de pensar en mi país. ¿Si México fuera el anfitrión de unos Juegos Olímpicos, qué concepto y mensaje buscaría transmitir al mundo? Y más allá de nuestras profundas y distintivas raíces históricas, sociales y culturales, de las cuales todos nos sentimos orgullosos, ¿qué presumirías como un concepto, institución o tendencia creada en México y exportada y reconocida en todo el mundo? ¿Cuáles son nuestras aportaciones al desarrollo global? ¿Qué tanto México hay en la comunidad internacional? ¿Qué país te interesa heredar a tus hijos y qué hacer para que éste trascienda a las siguientes generaciones y en todas las regiones? Es inevitable hacerte esa pregunta, por que en la respuesta está justamente el modelo de país que tienes en tu mente y a lo que te interesa aspirar como persona y sociedad. Te invito a que platiquemos sobre tu modelo e ideales.

Mientras tanto, felicidades Londres 2012 por todo lo que nos hicieron pensar y reflexionar y por hacer vibrar nuestros sentimientos. Felicidades a los ciudadanos globales por haber presenciado un gran evento, tal vez el mejor en muchos años.

La evolución del Olimpismo y las aportaciones de México

Atletas van y vienen con el paso del tiempo. Cada uno es héroe para su época o generación. De ahí que resulta interesante una comparación fotográfica de cómo cada gladiador olímpico enfrenta sus propias batallas.

Vean en estas imágenes que nos deja The New Yorker, cómo resalta la simplicidad de la tecnología, vestimenta e infraestructura en el inicio de los juegos en su concepción moderna.

Hoy, en cambio, existe toda una parafernalia en torno a los juegos. No sólo el gran despliegue de medios, tecnología, entretenimiento, patrocinios, sino el avance de las técnicas de entrenamiento y competencia.

Por eso es muy importante que a pesar de estos cambios de forma, el fondo del espíritu se conserve y fomente, pues el olimpismo es todo un concepto a favor del juego limpio, sana competencia, respeto entre naciones y tolerancia. Por eso ayer en twitter reflexionaba con @AnaFVega sobre lo negativo del grito de la porra mexicana en el partido de fútbol y que tenemos que hacer algo para erradicar la tristemente famosa expresión de cuando despeja el portero adversario de «puuuuuuuuu….».

Nuestro país tiene mucho más tradiciones, humor y fortalezas para ser recordados en esta justa olímpica, que por gritos discriminatorios. Hoy el talento de los clavadistas a todos nos dejó una gran satisfacción y esperamos que vengan más resultados positivos.

Los aficionados debemos dar muestra de tolerancia y respeto a la dignidad de todos los participantes.

No se pierdan este link de The New Yorker. También, encontré este otro link  que tiene una fotos espectaculares de las modas de las Olimpiadas de Londres en 1908 (vía@NPRPictureShow) . Mis respetos para las competidoras, ¡Imagínense correr o brincar con el largo de esas faldas!