El pasado 13 de noviembre participé en el Foro sobre la nueva Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión, organizado por la Asociación Nacional de Abogados de Empresa (ANADE), Colegio de Abogados, a invitación de mi querido amigo Federico Hernández Arroyo.
Presenté un caso de estudio sobre la emisión de la NOM 184 y de la estrategia de judicialización que hizo la Profeco en los años 2011 y 2012 para ampliar la protección de consumidores de telecomunicaciones.
Por un lado, partí del panorama de crecimiento sostenido que experimentaba la industria en los últimos años, mismo que fue asimétrico pues no promovió mejores prácticas comerciales en el sector, ni en fortaleció los derechos de los consumidores. Este escenario fue el marco para que el sector de telecomunicaciones fuera el que más quejas representaba ante la Profeco (25%) y que por tanto justificara promover medidas regulatorias que equilibraran el terreno. La mayor parte de las quejas que se encontraron tenían su origen en cláusulas abusivas de los contratos de adhesión que presentaban los proveedores a los consumidores. Por estas razones, la estrategia implicó impulsar la NOM 184, mediante la cual se obligaría a los proveedores a registrar sus contratos ante la Profeco (quien consecuentemente podría evitar que se presentaran a los consumidores cláusulas abusivas) y por el otro lado, emprender una inédita estrategia judicial, al promover acciones de grupo y demandar la nulidad de cláusulas abusivas en los contratos. En este último caso, la Suprema Corte de Justicia de la Nación concedió hace unas semanas la razón a la Profeco en los argumentos que se esgrimieron y confirmó la nulidad de cláusulas abusivas, engañosas o desiguales.
Estas acciones fueron el preámbulo a las reformas de 2013 y 2014 en la materia, y que han permitido profundizar la competencia, mediante el fortalecimiento de los derechos de los consumidores.
Bernardo Altamirano Rodrìguez, Gerardo Soria (IDT), Germán Saldívar (ANADE), Federico Hernández Arroyo (ANADE), Sergio Legorreta (Baker and Mackenzie) y Gabriel Székely (ANATEL).
Foto: Anatel